El terreno de la interpretación abarca una alta gama de actividades, eventos y sectores. En los últimos artículos del blog nos hemos referido a la importancia de este tipo de servicios en acontecimientos de empresas, marketing deportivo, negociaciones o producciones televisivas, por ejemplo. Es solo una muestra de la presencia de la interpretación en el día a día de muchas empresas e instituciones, y hoy queremos tratar un sector más en el que la participación de un intérprete se hace esencial.
Se trata del uso de la interpretación en los Servicios Sociales de la Administración. Hoy trataremos el caso concreto de dos ayuntamientos, pero sin duda es una situación extensible a cualquier centro de Servicios Sociales de España y, también, de muchos países que prestan atención a personas con todo tipo de demandas en las que debe intervenir un trabajador social, un educador social o profesionales del ámbito social.
Hemos conocido en primera persona el uso de los servicios de interpretación en los distintos centros de Servicios Sociales del Ayuntamiento de L’ Hospitalet de Llobregat, en Barcelona, donde a diario trabajadores y educadores sociales tienen entrevistas con usuarios que llegan con demandas, dudas o dificultades. La alta diversidad cultural de la ciudad, con más de 200.000 habitantes de muchas procedencias del territorio español y del extranjero, hace que de forma constante los profesionales del ayuntamiento atiendan a personas con idiomas de origen muy diversos.
Dada la importancia de los asuntos tratados durante las entrevistas, el Ayuntamiento cuenta con un servicio de interpretación que permite a los profesionales recibir con todo detalle la información que le transmiten los usuarios. En las entrevistas, el educador o trabajador social se encuentra acompañado del intérprete, que facilita la conversación y le permite tomar decisiones adecuadas a las demandas del entrevistado.
En el caso del ayuntamiento catalán, habitualmente la primera entrevista se realiza sin intérprete y el educador o trabajador social valora si es necesario contar con un servicio de interpretación. Existen ocasiones en las que el propio entrevistado va acompañado de algún familiar que domina el español o catalán, con lo cual no hay problemas de comunicación entre ambas partes.
Una vez valorado que sí es necesario, el profesional solicita mediante un formulario el servicio, detallando aspectos como el día y hora, el país de procedencia del entrevistado y el idioma o dialecto. También influye mucho en la petición el contexto socio-cultural de cada país o de cada persona. Por ejemplo, hay situaciones en las que el profesional solicita un intérprete mujer dado que la entrevistada es una mujer y se van a tratar cuestiones que, por varios motivos culturales o familiares, es mejor que presencie e interprete una persona de su mismo género.
El tipo de servicio habitual es la interpretación consecutiva, en la que el intérprete siempre espera a que cada interlocutor acabe su mensaje para después realizar la interpretación. Como es lógico, este tipo de entrevistas acostumbran a tener una duración superior a una entre un profesional y usuario que hablan el mismo idioma, pero es la mejor manera de que todos los mensajes lleguen de forma clara a los dos interlocutores.
Otra cuestión que nos explican los profesionales es que, preferiblemente, siempre tratan de vincular al mismo profesional con cada familia, de forma que ya se conocen, establecen una relación y favorecen las sucesivas entrevistas. Además, en muchas ocasiones el propio intérprete realiza otras aclaraciones contextuales del país del usuario o de su situación que ayudan al profesional a tener detalles más pormenorizados de cada caso. También el educador o trabajador social tiene una pequeña conversación previa con el intérprete para adelantarle los temas que se tratarán a lo largo de la entrevista.
Según nos explican fuentes del Ayuntamiento de L’ Hospitalet y del consistorio de Barcelona, también existe la posibilidad de la interpretación telefónica. En algunas entrevistas, si existen dificultades de comunicación y no se dispone de un intérprete in situ, se puede disponer de forma inmediata de un intérprete por teléfono para proseguir con la entrevista con la interpretación incorporada.
Respecto a la variedad de idiomas que requieren interpretación, en el caso de L’Hospitalet de Llobregat son muy amplios. Uno de los más solicitados es el árabe, dada la gran cantidad de personas procedentes de países árabes en el municipio. Otra lengua muy demandada es el urdú, lengua oficial en Pakistán y uno de los 24 idiomas oficiales en India. A ella se une el panyabi, también común en ambos países y hablada por más de 100 millones de personas. Otros idiomas como el rumano, el chino, el inglés, el ruso o el bengalí, idioma oficial de Bangladesh, también son habituales en las peticiones de interpretación tanto en L’ Hospitalet como en Barcelona.
La variedad de procedencias de L’ Hospitalet hace que también lleguen peticiones de lenguas menos comunes como, por ejemplo, el bambara, lengua hablada en Mali por 10 millones de personas, y también en algunas zonas de Burkina Faso, Costa de Marfil o Gambia. Para estos casos resulta más complicado dar con un intérprete por la especificidad del idioma, pero siempre se da con el profesional adecuado para prestar el servicio.
Sobre la vía de contratación, en el caso de los Servicios Sociales de L’ Hospitalet de Llobregat y de Barcelona se utilizan los servicios de interpretación de una empresa de traducción e interpretación que coordina todas las peticiones y asigna sus profesionales. Sin embargo, en otros departamentos de los propios ayuntamientos se contratan a personas en plantilla para una atención diaria al público. Por ejemplo, el servicio para cuestiones sobre Vivienda de L’ Hospitalet cuenta con un intérprete de marroquí que atiende directamente a las personas que lo necesitan, con un volumen de peticiones alto dado el amplio colectivo marroquí que reside en el municipio.
Sin duda, se trata de un tema muy interesante para conocer la importancia de los servicios de interpretación en el día a día de las administraciones locales, principalmente en la atención a los ciudadanos que necesitan comunicarse con toda la precisión posible con profesionales del área social.