¿Te has parado a pensar alguna vez por qué son tan importantes las traducciones juradas? Hacer una traducción no es nada fácil, pero la cosa se complica todavía más cuando el documento a traducir es un documento oficial. La traducción debe ser perfecta, no puede cambiar ni una coma; y para ello se necesita algo más que un traductor que domine a la perfección el idioma original y el de traducción. En estos casos recurriremos a un traductor jurado, un profesional que necesita una formación específica para que el texto traducido se ajuste al contenido original pero en otro idioma.
Como no podía ser de otra manera, la calidad es el gran objetivo de la traducción jurada. Aunque el traductor solo tenga que trabajar sobre un texto o documento, lo hace con el objetivo final de que tenga efectos legales ante una institución oficial. Así, el encargado de una traducción jurada deberá prestar atención a todos los matices del lenguaje y concentrarse en que todos los detalles que encontramos en el texto original se vean reflejados en el texto traducido para evitar cualquier omisión.
Por eso, el traductor jurado poseerá también conocimientos del ámbito específico del documento a nivel de frases y términos, lo que le permitirá traducir cualquier tipo de documento relacionado. Entre los documentos más destacados que necesitan una traducción jurada están los documentos notariales (como actas, partidas de nacimiento, poderes de representación, certificados de matrimonio o divorcio, escrituras, resoluciones jurídicas, testamentos, contratos comerciales, etc.); documentos médicos como historiales, informes y certificados; informes bancarios o certificados eclesiásticos; patentes.
Los documentos administrativos también están sujetos a traducciones juradas: títulos oficiales, cartas, diplomas, informes… hasta el permiso de conducir puede necesitar una traducción jurada para convalidarlo en un país extranjero. Como vemos, son documentos de vital importancia, por eso es importante que este tipo de trabajos sean realizados por traductores jurados. Este traductor, para poder darle validez legal a su trabajo, necesita la autorización del Ministerio de Asuntos Exteriores para dar fe de la traducción de un documento en otra lengua a través de su firma y un sello autentificador. BBLTranslation también realiza traducciones juradas con firma digital y ofrece servicios de interpretación jurada.
Así, nos podemos hacer una idea del peso que tienen los traductores jurados en la sociedad actual. Su papel es básico a la hora de firmar acuerdos comerciales internacionales, ya sea entre países, regiones o empresas; a la hora de convalidar los títulos de personas que deciden irse a vivir a otro país e incluso en las adopciones. Los padres que adopten a niños extranjeros también tendrán que recurrir a las traducciones juradas, ya que la normativa española señala que en las adopciones internacionales todos los certificados que no estén en español deben tener su traducción oficial -lo mismo pasa con los documentos en español-.